Capítulo 1019
En los labios de Alejandro apareció una sonrisa. —No es eso, solo que no quiero que nadie venga a separarnos, mucho menos ellos. Pero siempre me están deteniendo, incluso quieren que te cases con otro. ¿De verdad quieres verme muerto? ¿No sientes nada por mí?
Andrea no respondió, no sabía qué decir.
Él le dio un beso en la mejilla. —En dos días es la boda, duerme temprano, no vayas a decir luego que tu cara está demasiado hinchada.
Andrea esbozó una sonrisa, pero las palmas de sus manos estaban sudorosas.
Cuando se acostó esa noche, Andrea escuchó que él estaba hablando por teléfono. Al otro lado debía estar Oscar.
El viento afuera era muy fuerte, pero Andrea aún pudo escuchar su voz.
—Padre, mi madre tiene razón, tenemos el mismo gusto. Ahora los dos estamos contentos con el resultado. Tú no conseguiste lo que querías, pero yo sí. Lo que quiero me pertenece, y gracias a ustedes, ahora sé cómo mantener lo que quiero.
Alejandro terminó de hablar y sonrió suavemente. —Ah, y no los invita

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda