Capítulo 1113
Ella buscó una posición cómoda en sus brazos. —Escuché a César decir que quieres una oportunidad para volver a Llanoazul. ¿Es algo importante? Iré contigo.
Él inclinó la cabeza para mirarla y la estrechó con más fuerza. —Es muy importante. Pero cuando lo sepas, no te enojes.
Lorena alzó una ceja. Probablemente ya intuía que tenía que ver con ella; siempre que algo la involucraba, él perdía el control.
—No me enojaré. ¿Se puede resolver en una semana? Viendo lo apresurado que estás, podríamos salir mañana mismo y dejar todo a cargo de Isidro.
—Sí.
A la mañana siguiente, los dos emprendieron el viaje de regreso a Llanoazul.
Al volver a hospedarse en Jardines de la Paz, Lorena sintió como si hubiera pasado una eternidad. Al atardecer, Pedro le dijo que quería llevarla a un lugar.
Ella lo siguió sin dudarlo, pero solo al llegar comprendió que se trataba de la pequeña mansión donde Ignacio había vivido.
Hubo una explosión y allí solo debía quedar un montón de escombros. Pero ahora, la casa

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