Capítulo 375
Él le agarró la mano y le rozó la mejilla con la palma. —Si de verdad pudieras perdonarme, sería genial.
Lorena arrugó la cara y lo ayudó a levantarse. —Ignacio, tienes mucha fiebre, te voy a llevar al hospital.
"Ya estaba diciendo demasiadas tonterías, ¿y si al final la fiebre le deja secuelas?"
Él se apoyó en sus brazos. —No quiero ir al hospital, Lori, treinta y tres veces.
—¿Qué?
"¿Treinta y tres veces qué?"
Cada vez se sentía más inquieta. Volvió a levantar la mano para tocarle la frente, temiendo que se hubiera quedado tonto por la fiebre.
Él le agarró la mano, la apretó con fuerza y la llevó a su mejilla. —Las veces que has querido matarme.
A Lorena le dio un vuelco el corazón, pero enseguida sonrió. —Sí que te ha dejado mal la fiebre, duerme un poco. Si cuando despiertes sigues con fiebre, entonces tienes que ir al hospital.
En ese momento, ya no importaría si él quería o no dejarse ver la cara. No le daría opción.
Ignacio permaneció en silencio varios minutos, como si de repen

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda