Capítulo 744
Raquel sacó enseguida su celular, buscó el número de Alberto y lo marcó.
Muy pronto se conectó la llamada, y al instante la voz baja y magnética de Alberto se transmitió al otro lado: —¿Hola?
—Alberto, ¿qué estás haciendo? ¿Por qué te llevaste sin avisarme a Bethra?
—Raquel, ven a mi empresa, te espero en la oficina.
—Yo...— Raquel quiso negarse. Ya era muy tarde, y la última vez que fue a su oficina, él casi la obligó a tener relaciones con él.
Ahora Alberto de nuevo le pedía que fuera a su oficina por la noche. ¡No quería ir!
Pero Alberto no le dio oportunidad alguna de negarse. —Raquel, Bethra está aquí. Si no vienes esta noche, ¡no volverás a ver a Bethra!
¿Qué?
El rostro de Raquel se transformó. —Alberto, ¿qué quieres decir con eso? ¿Cómo que no volveré a ver a Bethra? ¡Bethra es mi hija! ¿Qué intentas hacer?
Alberto le respondió: —Raquel, ¿Bethra es solo tu hija?
Raquel quedó rígida. De inmediato comprendió algo y apretó el celular con fuerza. —Alberto, ¿qué quieres decir con eso

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda