Capítulo 196
Efectivamente, eran marcas de besos.
Pero no las había dejado él.
De hecho, durante el tiempo que Ignacio estuvo saliendo con Patricia, hubo momentos en que casi se dejó llevar por la pasión y la asustó, pero siempre logró contenerse.
Excepto aquella vez que, en un arrebato de pasión descontrolada, besó su cuello.
Pero la marca en el pecho de Patricia definitivamente no era obra suya.
Un nombre se le vino a la mente: Álvaro.
Ignacio sintió como si un balde de agua fría le hubiera caído encima; la pasión se evaporó y se enfrió de la cabeza a los pies en un instante, perdiendo todo interés.
Incluso llegó a pensar que habría sido mejor no haber visto aquello.
Patricia no percibió su cambio de actitud y, justo cuando él se detuvo, ella dijo: —Dame un momento, voy a tirar la basura.
Ignacio dio un paso atrás, soltó su mano y con una sonrisa forzada en sus labios, de repente propuso: —Casémonos.
—¿Qué?
Patricia estaba desechando los restos del fregadero en la basura cuando escuchó la propues

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda