Capítulo 324
—Basta, Osirio. ¿No ves lo asustada que está ya de ti? —dijo Harvey mientras intentaba calmar a Osirio.
Me di cuenta inmediatamente de que ningún esfuerzo lograría calmar a Osirio en ese momento.
"¿Por qué eres tan blando con las mujeres?", espetó Osirio.
—Bueno, ¿porque son mujeres, claro? Si soy duro con ellas, acabaré matándolas a todas... —respondió Harvey quizás con demasiada sinceridad.
—¿Cuántas veces tengo que decirte que te alejes de ella? No es tu mujer —replicó Osirio con vehemencia.
—¿Y es tuya? ¿Cómo es eso? —preguntó Harvey, ladeando la cabeza con curiosidad.
—Harvey… —murmuró Osirio.
“Acostarse con ella, mantenerla encerrada aquí, llamarla tuya... es algo tan fácil e irresponsable de decir…” Harvey comenzó a sermonear a su hermano.
“Harvey, por favor…” Le susurré suplicante a Harvey que dejara de provocar a Osirio cuando finalmente recuperé la voz.
Cómo decido tratar a mi mujer no tiene nada que ver contigo. Si eres tan libre, deberías estar intentando despertar a Elena.

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda