Capítulo 9
Por otro lado.
El olor a desinfectante impregnaba la habitación del hospital. Alejandro estaba sentado junto a la cama de Sara, pero su mirada parecía distraída.
En ese momento, su teléfono vibró de repente. Apareció un aviso de transferencia de archivos, y el remitente era, nada menos que, Nuria.
¿Nuri? Estos días ella siempre había sido indiferente con él, y esta era la primera vez que le enviaba un mensaje.
Alejandro no entendía la intención, pero por alguna razón se sintió inquieto y abrió inmediatamente el archivo.
La barra de progreso de la descarga avanzaba lentamente, y cada segundo parecía torturar su paciencia. Sara lo llamó suavemente, pero no logró aliviar ni un ápice de su ansiedad.
Finalmente, la descarga terminó y él, impaciente, abrió el archivo.
Lo primero que apareció fue un video.
El fondo era la habitación de Sara; en la imagen, él bajaba la cabeza, concentrado y torpe, pelando una naranja para Sara.
El ángulo de la filmación era discreto, claramente tomada a escond

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda