Capítulo 222
Mónica apretó su pequeño puño, y de la frente le brotaron gotas de sudor por los nervios.
Tenía confianza en las habilidades médicas de Braulio, pero lo que más le preocupaba era que Braulio y Ezequiel terminaran peleándose.
Ezequiel era una persona que practicaba artes marciales tradicionales; Braulio definitivamente no era su rival.
La sala de conferencias estaba tan silenciosa que se podía escuchar caer un alfiler.
Ezequiel apretó los dientes, sabiendo que ese no era el lugar para pelear, y dijo en un tono frío: —La reunión de hoy se cancela, ¡todos pueden retirarse!
Dicho esto, se dio la vuelta y se fue.
Tan pronto como Ezequiel se fue, todos soltaron un suspiro de alivio.
Aquellos que Braulio había diagnosticado con problemas de salud se apresuraron hacia él.
—Doctor Braulio, tengo disfunción eréctil, por favor, recéteme algo.
—Doctor Braulio, atiéndame primero.
—Doctor Braulio, mi vista está un poco borrosa, por favor recéteme algo, temo quedarme ciego.
...
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