Capítulo 285 Atreverse a jugar conmigo
En ese momento, Lorena mostró una expresión de sorpresa.
—¿Ángel fue quien liberó a tu padre? Yo había encargado ese asunto a mis subordinados. El día que me llamaste para informarme de que tu padre ya estaba libre, pensé que habían sido ellos quienes se habían ocupado.
Silvia agregó: —Tal vez los subordinados no lo hicieron correctamente.
—Cuando regrese, definitivamente les impartiré una lección.— afirmó Lorena. —Pero, por cómo están las cosas, Ángel realmente siente algo por ti. Entonces, ¿por qué no deseas volver a trabajar con él?
Silvia no ofreció muchos detalles, simplemente respondió: —Señora Lorena, solo necesito su ayuda con esto.
Lorena parecía impotente y lamentablemente dijo: —Ay... está bien, respeto tu decisión. Justo esta mañana, Emilio mencionó que un amigo había fallecido. Él debería haber ido personalmente al funeral, pero, como no se siente bien, pensó que solo Ángel podría representarlo. Será en Ciudad Valleblanco, y no volverá en dos o tres días.
Silvia finalmente

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