Capítulo 77
Ambos hombres llevaban máscaras de fantasma y se veían horribles bajo la luz de los faros.
Ashley estaba tan asustada que gritó sin control mientras corría hacía el auto para encerrarse. Los tipos la siguieron con martillos y cuchillos ensangrentados en las manos.
Presa del pánico, la chica comenzó a temblar y tomó su teléfono para hacer una llamada.
En cuanto escuchó que contestaban, gritó: “¡Mason, he visto a un par de fantasmas! ¡Ven a ayudarme, por favor!".
Mason estaba confundido: "¿Estás loca? ¿Segura de que se trataba de fantasmas?”.
"¡Sí, eran fantasmas de verdad! Me están siguiendo con martillos y cuchillos… ¡Están llenos de sangre! Por favor…”.
Antes de que ella pudiera terminar sus palabras, los dos fantasmas se acercaron a su auto.
Uno de ellos levantó el martillo y lo golpeó contra el parabrisas, y el sonido de los cristales rompiéndose hizo que Ashley gritara despavorida.
Luego de esto, la llamada terminó, dejando a Mason sin saber qué hacer. Los gritos que acababa de esc

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