Capítulo 1277

Cuando Alicia escuchó esas palabras, arrugó la cara y dijo: —¿Qué quiere hacer él? —En concreto, no lo sé muy bien. Pero según lo que conozco de Oscar, tú te marchaste durante la celebración. Quién sabe qué estará tramando ahora en su corazón. Así que, te doy un consejo: basta con que le des un regalo barato. Ella lo pensó y dijo: —Ya lo sé. —Alicita, yo solo espero que en el futuro te vaya bien. Después de escuchar estas palabras, miró el paisaje fuera de la ventana. Tras un momento de silencio, respondió: —Así será. Ella jamás volvería a cometer los mismos errores. Después de colgar el teléfono, Roberto se acercó y la abrazó: —¿Quién te llamó? Alicia le contó toda la conversación que acababa de tener. Él suspiró. —No es necesario que lo hagas. —Pero su advertencia tiene sentido, ahora no conviene empeorar la relación. Además, espero que el tratamiento de la señora Teresa en el futuro pueda ser lo menos doloroso posible. Ella cubrió la boca de él con la mano: —Sé lo que quieres decir,