Capítulo 1318
Yalena soltó un suspiro de alivio de inmediato; había temido que ya hubieran descubierto su verdadera identidad.
Miró a Belén y le dijo: —Mira, hasta Alicia ya lo sabe, así que no hace falta que la llames.
—Pero seguramente no sabe que eres la tía materna de María.
Yalena respondió enseguida: —Belén, ayúdame a ocultarlo un tiempo, ¿sí? Cuando lo de Augustito se resuelva, iremos juntas a explicárselo a Alicia.
Belén dudó. —¿Pero por qué?
—Te lo suplico. Ahora mismo no tengo tiempo de darle explicaciones a Alicia. Tú tampoco quieres que haya malentendidos, ¿verdad?
Belén se dejó caer en el sofá, mirando a María con desagrado. —Es que ella no me cae bien.
Yalena intervino. —Déjamelo a mí, tú solo espera aquí. Déjame hablar con ella un momento.
Yalena tomó de la mano a María y la llevó hacia afuera.
María protestó: —No quiero irme.
Yalena no tuvo más opción. —Ven conmigo arriba.
Ahora María estaba contenta; miró a su alrededor y dijo: —Con que me asignen una habitación en el segundo piso m

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