Capítulo 1641

Alicia se detuvo un instante y dijo: —No es preocupación, es que conocer al enemigo y conocerse a uno mismo asegura la victoria en cada batalla. Aurora intervino. —Hermano, investiga. Miguel respondió sin variar el tono: —Está bien. Alicia sonrió y dijo: —Hijo mío, tu madre te extraña mucho, ¿tú me extrañas a mí? —Voy a colgar. Miguel, siempre frío y distante, colgó la llamada. Alicia suspiró y, abrazando a Aurora, comentó: —Mira qué cariñosa eres tú, ¿por qué tu hermano es tan frío? ¿Será que se parece a ese hombre despreciable? —Él está contento, solo lo disimula. Alicia miró a la niña en sus brazos. —¿De verdad? Yo no lo noto. —Aunque parece inexpresivo, en realidad le gusta que mamá se preocupe tanto por él, solo que le da vergüenza. El ánimo de Alicia mejoró al instante. Miró a Aurora y le preguntó: —¿Y tú por qué no tienes vergüenza? —Porque yo tengo la cara muy dura. Alicia soltó una risa alegre. —¿Dónde aprendiste esa expresión? —En la televisión. Alicia abrazó a Aurora con ter