Capítulo 910

Aunque Roberto no le había dicho nada, María simplemente quería que Alicia sufriera aún más, que su dolor fuera mayor que el suyo. ¿Por qué ella podía estar con un hombre tan rico y, en el futuro, tener una vida tan buena? Si en realidad, ella no era inferior a Alicia en nada. En los ojos de María había resentimiento y odio: —Alicia, esto tampoco te lo contó Roberto, ¿no? Alicia solo sentía un frío recorriéndole todo el cuerpo; de hecho, no sabía que la noche anterior Roberto también se había llevado a María. Roberto no le había contado nada. En ese momento, no sabía qué era real ni en quién debía confiar. Alicia miró a María: —¿Para qué te llevó a ver a la gente de la familia Mendoza? Alicia pensó en lo que Roberto dijo sobre la enfermedad de la señora Teresa, ¿acaso hizo algo anoche? María se burló: —Por supuesto que fue a enfrentarse con la señora Beatriz y la amenazó para que no dijera que la familia González también estuvo involucrada en este asunto. Si no, él no dejaría en paz a