Capítulo 21

Con una mirada de resignación, Silvia dijo: “Uno de los nuevos empleados colocó en el muestrario un vestido que diseñé para tu cumpleaños. A alguien le gustó e intentó comprarlo”. Dulcie la miró con curiosidad. “¿Cómo se ve? Ya que tenemos que ir a una fiesta esta noche, ¿puedes decirle a Kimberly que me lo traiga? ¡Me gustaría usarlo en la fiesta!”. “Tu cumpleaños es en medio mes. Puedo dártelo cuando llegue el momento. Por ahora, vuelve a trabajar. Tenemos que revisar unos documentos”. Dulcie trató de convencer a Silvia para que cambiara de opinión, pero no sirvió de nada, así que no tuvo más remedio que volver a trabajar. Por la tarde, Silvia recibió una llamada de Neil justo cuando estaba por salir del trabajo. “Te espero abajo. ¿A qué hora sales del trabajo?”. Neil sonaba frío. Era obvio que todavía estaba enojado por lo que había ocurrido la noche anterior. “A las 5 p.m. Todavía faltan diez minutos. Si tienes prisa, puedo bajar ahora”. “No es necesario. Te espero”. Una v