Capítulo 128
Raquel acababa de vomitar cuando Rafael la esperaba afuera.
Le extendió una toallita húmeda, diciéndole, —Límpiate.
Raquel rechazó la toallita, —Rafael, ¿cómo puedes engañar así a tu madre? ¿No te pesa en la conciencia?
Rafael frunció el ceño. —Raqui, todo lo que hago, lo hago por ti. Ahora que todos saben que estás embarazada, ¿realmente piensas cargar con la infamia por este niño?
—¿Qué tiene que ver contigo si cargo con la infamia o no?
—¡Por supuesto que tiene que ver conmigo! —Rafael se colocó frente a ella, bloqueándole el paso. —Sé que todo es mi culpa; si no hubiera cometido ese error, si no hubiera caído en la trampa de Clara, no estarías sufriendo ahora, y Bruno no habría aprovechado la situación.
Mientras hablaba, sus manos, colgando a los costados, se cerraban en puños involuntariamente. —Lo que está hecho, hecho está, y de nada sirve seguir hablando. Raqui, no te culpo ni te desprecio. Por favor, dame una oportunidad, y date una a ti misma. Sé que todavía me quieres, pode

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