Capítulo 85
Catalina respondió con voz fría: —Entonces no se moleste, señor Alejandro.
Alejandro, como si hubiera captado lo que pensaba, dijo con indiferencia: —Catalina, sé que quieres salir del paso con excusas como que estoy trabajando horas extra o de viaje. Pero ¿de verdad crees que mamá es tan fácil de engañar?
Catalina arrugó la frente. —Es mi mamá, no la tuya.
La llamaba "mamá" con tanta soltura, como si le naciera con absoluta naturalidad.
Alejandro la miró. —¿Y entonces qué? ¿Se supone que debo llamarla "señora" delante de ella? ¿Y si me pregunta, le digo que es tu madre, no la mía?
Catalina se quedó sin palabras ante la réplica de Alejandro.
Unos segundos después, respondió con frialdad: —Alejandro, ¿qué es lo que realmente quieres?
—Te estoy ayudando, ¿no lo notas?
—¿Ayudarme? —Catalina lo miró con desconfianza—. ¿Desde cuándo te volviste tan considerado?
Los ojos de Alejandro se oscurecieron ligeramente. —¿Tan mala opinión tienes de mí?
Catalina esbozó una sonrisa ligera. —Parece que

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.