Capítulo 399

Después de una noche salvaje bebiendo mucho, Kingsley se despertó en la cama con una mujer, ambos desnudos. Para empeorar las cosas, ella resultó ser la futura cuñada de su prometida. Kingsley no tenía intención de romper dos matrimonios, ni el suyo ni el de ella, pero cuando notó la reveladora mancha de sangre en las sábanas, decidió asumir la responsabilidad. Lo que no sabía era que esta mujer, con la que tuvo una noche apasionada, era cautelosa y emocionalmente distante. *** Hasta altas horas de la noche, alcohol, un hombre, una mujer. Era natural que cuando estos cuatro elementos se combinaran, sucedieran cosas extrañas. El cerebro de Vanessa estaba confuso y podía sentir un peso sobre su cuerpo. Y dolor. Borracha, le faltaban fuerzas para resistirse o pronunciar una sola palabra. Rindiéndose a los deseos de su cuerpo, dejó escapar suaves gemidos. Para ella, esos sonidos eran una manifestación de su malestar, pero para los oídos de Kingsley, se convirtieron en un afrodisíaco que lo