Capítulo 18
Afuera de los ventanales, el crepúsculo se había ido espesando, tiñendo su rostro con una luz cálida, totalmente distinta de la distancia que él mostraba cuando se encontraron por primera vez en el aeropuerto.
—Me llamo Sofía.
Él se puso de pie para abrirle la silla, con los dedos largos y definidos apoyándose levemente en el respaldo.
—No pensé que volveríamos a vernos de esta manera.
Sofía dejó los documentos sobre la mesa con suavidad. —Realmente es una coincidencia.
Al sentarse, notó que Bruno le acercaba el menú.
—Comamos primero. ¿Hay algo que la señora Sofía no pueda comer?
Los dedos estilizados de Bruno pasaron sobre las imágenes de los platos. —La paella de este lugar está muy bien preparada. ¿Eres alérgica a los mariscos?
Ese detalle hizo que Sofía se sorprendiera levemente. En el pasado, cuando asistía a cenas con Adrián, él siempre pedía los platos que le gustaban a Valeria.
Jamás le importaron sus preferencias.
Y ni siquiera sabía que ella tenía alergias.
—A los mariscos n

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.