Capítulo 16
—Rocío. —Dijo Federico con resignación: —No es lo que piensas, por favor, ayúdala a levantarse.
—Está bien.
Rocío dejó la sopa a un lado y, mientras limpiaba diligentemente, tomaba fotos a escondidas con su celular.
Ayudó a Gabriela a levantarse y la acomodó en la gran cama; luego ayudó a Federico a volver a su silla de ruedas. Después preguntó: —Señora Gabriela ya se durmió, ¿todavía necesitamos la sopa para despejar?
Los ojos de Rocío eran como un microscopio, decidida a no perderse ningún detalle. Todo esto tenía que observarlo bien para luego contárselo a la señora Valeria.
—Déjala a un lado por ahora.
—Está bien. Entonces, señora Gabriela puede dormir aquí esta noche, así se cuidan mutuamente.
—Está bien. —Él no necesitaba dormir aquí esta noche.
Con el permiso de Federico, Rocío se fue feliz, incluso olvidando cerrar la puerta.
Apenas salió, llamó ansiosa a Valeria, mientras caminaba y hablaba: —¡Señora Valeria! Hubo besos, ¡besos tan intensos que hasta se le hinchó la boca!
Es

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.