Capítulo 43 No te mereces su amor

Deirdre no tuvo practicamente ninguna oportunidad para reaccionar. Una fuerza bruta, salida aparentemente de la nada, rodeó firmemente su muñeca y la aplastó con tanta fuerza que ella se preguntó si sus huesos iban a ser pulverizados. El terror hizo palidecer su rostro. ¡Brendan los había descubierto! El hombre la fulminó con la mirada. “¡Nada mal, Deirdre! En serio has perfeccionado el arte de ser una p*rra. La última vez que te vi estabas en mi cama. ¿Pero ahora? ¡De repente estás aquí, ansiosa por abrir tus piernas para ser follada! Vaya, vaya, ustedes dos se habrían ido de la ciudad si hubiera llegado dos segundos tarde…”. Sterling apenas y le dio tiempo a Brendan de terminar su oración antes de lanzarle un puñetazo lleno de ira en la nariz. “¡Vete a la m*erda, Brighthall! Dios, hablas pura m*erda. ¿Qué carajos te pasa? ¡¿Cómo te atreves a humillar a Dee de esta manera?!”. La fuerza empujó la cara de Brendan a un lado. Un hilo de sangre salía de la comisura de sus labios, pero