Capítulo 35

Luis y Carmen se acercaron. —Doctor, ¿cómo está mi hija? Carmen estaba de pie a la derecha. —¿El niño... se aborto? Luis estaba a la izquierda. El doctor se quitó la mascarilla.—La paciente ya está fuera de peligro, y el bebé también se ha salvado. Sin embargo, necesitará cuidados especiales para evitar cualquier tipo de secuela. Carmen asintió rápidamente. —Doctor, ¿cuándo se puede interrumpir este embarazo? Luis, ansioso por que su hija rompiera todo vínculo con ese patán, preguntó con impaciencia. El doctor creyó que había escuchado mal. —¿Cómo dice? ¿No están tratando de salvar el embarazo? —No... no exactamente... Incluso Luis, un veterano del mundo de los negocios, se sintió avergonzado en ese momento. —Si quieren interrumpir el embarazo, es algo fácil; ahora mismo cualquier estímulo podría hacer que pierda al bebé. Pero no se los recomiendo, porque durante el tratamiento descubrimos que su útero es muy frágil. —Abortar dañaría su cuerpo y, quizás, nunca pueda volver a qu