Capítulo 21

Pasaron otros dos días, y llegó el cumpleaños de Ángela. Benjamín dejó de lado todos sus compromisos laborales a propósito, pero no fue sino hasta el momento de preparar el pastel que se dio cuenta de lo poco que conocía sobre ella. Ni siquiera sabía qué sabor de pastel le gustaba, así que, sin otra opción, decidió comprar todos los tipos y sabores posibles. Probablemente era la primera vez que acompañaba formalmente a Ángela en su cumpleaños. Después de todo, antes de su parálisis, él, siendo un hijo privilegiado, jamás habría notado el cumpleaños de una estudiante pobre a la que su familia patrocinaba, y luego, cuando ella se acercó a él, su carácter ya había cambiado mucho a causa de su discapacidad: sólo pensaba en lo vergonzoso de su situación, temiendo que los demás lo vieran así, y se desquitaba con ella. Con el tiempo, bajo el cuidado y el aliento de Ángela, Benjamín fue mejorando poco a poco, y finalmente aprendió a contener su mal carácter y tratar a los que lo rodeaban con s