Capítulo 1337

Luis tenía una cara sombría y honesta, con solo verlo, era imposible imaginar que alguien así hubiera mantenido a una chica cautiva durante tanto tiempo. En cuanto llegó, los guardaespaldas en la puerta bajaron la cabeza en silencio, abrieron la puerta de la habitación y se alejaron para esperar no muy lejos. Todos sabían lo que iba a pasar dentro de esa habitación, después de todo, llevaban años custodiando ese lugar. Luis entró y empezó a desvestirse, sin apartar la mirada de Laura. Cuando llegó al borde de la cama, le agarró la pierna y comenzó. Laura le rodeó el cuello con los brazos y se acercó para besarlo. Luis se apartó de inmediato, frunciendo las cejas. Nunca se besaban cuando hacían el amor. No estaba acostumbrado a besar a nadie, pero esa noche fue ella quien lo hizo primero. Ella nunca tomaba la iniciativa. Así que, tras apartarse unos segundos, volvió a girarse y le mordió los labios. —¿Por qué estás tan dispuesta esta noche? ¿Quieres salir de aquí? Al principio, Laura sí