Capítulo 850

Emilio miraba su teléfono muy detenidamente, sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo. Mientras tanto, Lorena y Benjamín seguían en la fiesta. Emilio observaba a Titán y Ares corriendo afuera, y por un momento, sus ojos se enrojecieron, sintiéndose completamente perdido. A los diez años, fue recogido por Silvio y llevado con la familia Hernández. Silvio lo trató, buscó médicos para curar las horribles cicatrices de su cara; de no ser por él, aún seguiría siendo un monstruo. Silvio siempre fue muy bueno con él, al igual que León. Los demás decían que él era el perro de la familia Hernández, y él nunca sintió que ser perro lo hiciera inferior. Pero ahora, se sentía mal, como si todo en lo que había creído durante tanto tiempo comenzara a desmoronarse. Esa sensación de que su fe se desplomaba era lo suficientemente desgarradora como para hacerlo colapsar. Lorena no sabía nada de esto. Después de que Miriam se fuera, fue a ver a Andrea. Andrea había cerrado el trato con Bianca, y ahora e