Capítulo 63

Alonso colgó con rapidez. Regina aún no había alcanzado a devolverle el celular a Elena cuando enseguida entró la llamada de Alonso. —Este es mi número. La voz firme de Alonso se escuchó al otro lado. Regina intrigada se preguntaba cómo era que Alonso tenía su número. Ella, en realidad, no recordaba haber intercambiado con él los números de celular. Pero antes de que pudiera pensar demasiado en ello, la voz grave de Alonso continuó con firmeza: —¿Querías llamarme por lo de los regalos de la boda? Regina lo sintió casi mágico. Alonso incluso había adivinado lo que quería decir. Aunque, pensándolo bien, eso la liberaba de tener que buscar las palabras adecuadas para explicarse. Contestó: —Sí... Los regalos... Son demasiados. Aunque no los había revisado uno por uno, con solo echar un par de miradas a todo podía darse cuenta de que eran objetos de gran valor. Cada pieza era tan costosa que, incluso así fueran solo dos o tres, la familia Gómez no podría corresponder. Y ahora estaban abarro