Capítulo 58 Extremadamente estúpido

Después de reírse, Luis miró a Simón como si estuviera viendo a un verdadero idiota. —¿Qué dijiste hace un momento? No lo escuché bien. ¿Dijiste acaso que tengo que mudarme en tres días? ¿Y que además debo pagar cien millones de dólares como compensación? ¿No será que tal vez te golpeaste la cabeza cuando entraste? Si no fueras tan estúpido, ¿cómo se te ocurriría hacerme semejante exigencia como esa? Luis apretó furioso los puños y le ordenó a Simón con un tono amenazante. —Inclínate ahora ante mí y te daré una muerte digna. De un solo puñetazo te voy a reventar la cabeza. Quiero ver si dentro de ese cráneo tuyo de idiota que tienes, además tienes algo más que masa de tofu. ¡Boom! Luis lanzó un puñetazo directo a la cabeza de Simón. ¡Ese golpe vino acompañado por una ráfaga brutal! Hasta una desprevenida mosca que pasaba por ahí fue derribada por el viento del golpe. El golpe se precipitó con fuerza, pero Simón dio un paso atrás y con sagacidad lo esquivó. ¡Pum! El puñetazo de Luis imp