Capítulo 244

Cuando la luz golpeó su cuerpo, se veía sola y lamentable. Félix trajo las gachas de azufaifo recién calentadas. Casi no comió mucho en la cena, solo tomó un par de bocados. Félix sintió que la estaba viendo perder peso día a día. Como si no hubiera oído sus pasos, apoyó la barbilla en las rodillas y bajó la mirada hacia el teléfono que tenía a sus pies. Félix sabía que estaba esperando la llamada de Charlie. Después de que la abuela se fue, por supuesto, él no la dejaría enfrentar esto sola. En los últimos tres días, hablaba con Charlie por teléfono. Al igual que el día que estuvo en el hospital, se esforzó mucho en demostrar que estaba bien. Por varias veces, vio la sonrisa forzada en su boca, y luego se tapó la cara con las manos cuando colgó el teléfono... A pesar de lo doloroso que era perder a un ser querido, todavía trataba de aguantar, solo para evitar que Charlie se preocupara. Félix inconscientemente apretó su mano, y hubo una emoción en su pecho que sobresalía. Cuando lo not