Capítulo 70

A Stella se le oprimió el corazón. Había dos cosas a las que siempre les había tenido miedo. La primera era que Rene supiera de la existencia de Adrian, y la segunda, que algún día, cuando se conocieran, Adrian confiara en su padre biológico. No esperaba que aunque solo se hubieran visto pocas veces, el niño se sintiera atraído por la fuerza de la sangre. Sentía un afecto inexplicable hacia Rene. Stella se quedó plantada en el suelo. Por un momento, no supo qué hacer para disipar la brillante idea de su preciado hijo. Adrian vio que Stella no dijo nada y se quedó inmóvil. Su expresión cambió. Pensó que la había hecho enojar. Frunció los labios y tiró del vestido de Stella con sus manitas regordetas. Ya no se estaba comportando con terquedad. Dijo: "¡Mamá, solo estaba bromeando! ¡No te enojes! ¡Me gusta más estar con mi querida mamá!". Luego abrazó las piernas de Stella. Parecía una pequeña esposa que suplicaba perdón. Era lindo y molesto. Después de eso prometió: "¡Te haré caso! ¡Me ma