Capítulo 24
La nieve en Nova empezó a caer de repente.
Leonardo estaba de pie frente a la puerta de la casa de huéspedes de Elisa, con una fina capa de nieve sobre su abrigo negro. La punta de sus dedos se había puesto rojas por el frío, pero aun así sujetaba firmemente aquel sobre de documentos.
Él fijó la vista en la puerta cerrada, su nuez de Adán se movió, y finalmente levantó la mano para llamar.
La puerta se abrió.
Elisa apareció en la entrada. Al verlo, su expresión no mostró la menor emoción. —¿Qué quieres?
La respiración de Leonardo se detuvo por un momento.
Pensó que cuando la volviera a ver, tendría muchas cosas que decirle, pero en el momento de la verdad, descubrió que tenía la garganta obstruida y no podía emitir ningún sonido.
—Yo... —Su voz sonó ronca, y extendió el sobre de documentos hacia adelante—. Espero que puedas echarle un vistazo.
La mirada de Elisa se posó sobre los documentos, pero no los tomó. —¿Qué es esto?
—Todo lo que Josefina te hizo. —Los dedos de Leonardo temblaro

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.