Capítulo 184

Sin embargo, las caricias que tanto ansiaba no llegaron a suceder. Al contrario, ella solo podía sentir su dedo frío contra su cara. "Hay algo cerca de tu boca. Te lo quitaré". Julian le pasó suavemente el dedo por la boca. "Ya no está". Kayla recordaba claramente mirarse en el espejo varias veces para asegurarse de que tenía la boca limpia mientras esperaba detrás de la puerta. ¿Cómo podía tener algo en la cara? Las lágrimas de Kayla cayeron al instante. "Julian... ¿No te gusto?". ¿Por qué siempre se negaba a tocarla? "Eso no es cierto". Julian le alborotó el pelo. Luego se quitó el abrigo y se lo puso alrededor del pijama empapado de lágrimas. "¿No te dije? Eres muy preciosa, así que no puedo tocarte tan a la ligera". Julian habló en voz alta. Sin embargo, de repente escuchó pasos detrás de él. Rápidamente se dio la vuelta. "¿Quién está ahí?". No había nadie en el pasillo, pero se escuchó el sonido de una puerta que se cerraba desde la dirección del dormitorio de Diana. ¿El