Capítulo 94

Raúl se enfureció de repente al escuchar esas tontas palabras. —¿Quién te dijo que ella no jugaba a los videojuegos? Camila tenía una técnica increíble para los videojuegos, ¡él nunca había visto a alguien jugar mejor que ella! Resultaba que, durante el tiempo que Camila había estado en la familia Gutiérrez, ellos le habían puesto la etiqueta de que no jugaba, mientras le daban un celular viejo e inútil, y al mismo tiempo la obligaban a subir de nivel la cuenta de Ignacio. ¡Dios mío, qué mala suerte había tenido esta pobre Camila! Ella también lo comprendió de repente. Con razón la familia Gutiérrez le regalaba un tiesto de celular cada cierto tiempo, pero siempre eran de esas baratijas con los que no se podía jugar. ¡Así que, además de ponerle un localizador en secreto, también lo hacían para evitar que jugara! ¿Acaso de qué tenían miedo? ¿De que su cuenta alcanzara un nivel más alto que la de Ignacio? ¡Era algo ridículo! Ella nunca se había preocupado por eso, en realidad ni siquiera