Capítulo 123
—¿Qué esperabas? Te expones mucho viniendo a trabajar a un lugar como este; un paso en falso y podrías acabar muerta.
Le reprendió Vicente.
Silvia realmente se asustó y, con miedo, respondió: —No tenía otra opción; un compañero de clase me recomendó venir aquí, dijo que podía ganar mucho dinero.
—Si necesitas dinero en el futuro, solo dímelo.
—Te busqué, pero no pude encontrarte. También fui a tu casa en secreto, pero ya no vive nadie allí. Escuché que te habías vuelto adicto y que habías perdido todo tu dinero en apuestas, y que habías desaparecido.
Silvia se sobresaltó un poco cuando vio a Vicente en el salón por primera vez.
Una persona normal no querría tener nada que ver con un adicto o un jugador compulsivo.
—Chica tonta, te considero como una hermana, ¿acaso no sabes cómo soy? ¿Cómo pudiste creer esos rumores tan fácilmente?
Dijo Vicente, pellizcando su mejilla con reproche.
—Lo siento, Vicente, ¡ay, duele!
Exclamó Silvia, pidiendo clemencia.
Cuando Vicente soltó su mano, Sil

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.