Capítulo 1189

Mirar hacia adelante. La equivocada no era precisamente ella, sino esos dos demonios. —Así que, señorita Ana, por favor ayúdame. También puedo pagar una recompensa, tengo dinero, es una compensación que ellos me dieron. —Dijo Daniela secándose cuidadosa las lágrimas y mirando seriamente a Ana. Ana respondió mientras observaba a Daniela: —Puedo ayudarte, pero necesitas decirme en qué parque viste a ese señor mayor, ¿y recuerdas cómo se veía? Primero, Daniela mencionó cuál era el parque y la fecha exacta. Sin embargo, al intentar recordar cómo lucía el señor mayor, se encontró con dificultades: —No sé por qué, pero no puedo recordar, he olvidado completamente cómo se veía el señor. Solo tengo una vaga sensación de que se parecía a los señores mayores que bailan en la plaza, no hay mucha diferencia. Ana, con un semblante serio y sin sorpresa ante esta situación, ya que no era la primera vez que lo experimentaba, dijo: —Si no puedes recordar, entonces no lo fuerces ahora. Primero entrégam