Capítulo 500

¿Es comestible? Nunca había oído que él cocinara. Además, cuando ella se mudó a La Villa Estrella del Mar, parecía que él no solía desayunar. —Por supuesto —dijo Alejandro con cierto orgullo. Después de todo, había dedicado media hora a preparar este desayuno. Ana bajó las escaleras con una mezcla de anticipación y nerviosismo. La anticipación venía porque Alejandro había preparado el desayuno. El nerviosismo, porque no sabía si sería comestible. No había sido fácil para ella renacer, quería vivir bien y no morir envenenada. Al ver el desayuno sobre la mesa, Ana suspiró aliviada; todo parecía estar en orden. —Cereal, huevos cocidos y algo de fruta, ¿qué te parece? —Alejandro también había querido preparar un caldo reconfortante como el de Ana, o quizás leche. No sabía cómo usar la olla arrocera ni cuánta agua añadir. En cuanto a la pasta, no sabía ni por dónde empezar. Afortunadamente, había encontrado una manera fácil de preparar el cereal con leche, y cocer huevos no representaba nin