Capítulo 55
—Sí, es ella. Abuelo, te digo, ¡creo que ella podría ser incluso mejor que tú! —dijo Pablo con entusiasmo. No estaba exagerando. Según Ricardo, había conocido a muchos restauradores que parecían bastante arrogantes, pero cuando se trataba de trabajar, su nivel era bastante común, nada comparado con Ana.
Ricardo había preguntado a Ana quién era su maestro, y ella simplemente dijo que había aprendido de una anciana en el campo.
Don Ramón no se lo tomó en serio. Pablo siempre había sido un espíritu libre y no conocía a mucha gente que trabajara de manera honesta y seria. Que él elogiara a alguien dependía completamente de sus gustos personales.
Además, que alguien tan joven fuera mejor que muchos restauradores del sector era difícil de creer, especialmente viniendo de su nieto.
—Vete de aquí y no me molestes más. —dijo Don Ramón, haciendo un gesto con la mano.
—Abuelo, me levanto todos los días temprano, corro diez kilómetros y tomo el autobús. Mis piernas están agotadas. ¡Ten piedad de m

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.