Capítulo 106

Por supuesto, Enrique esperaba que el niño fuera su hijo. Sin embargo, no se atrevió a tener tal esperanza. Cuanto mayor es la esperanza, mayor es la decepción. Hace cinco años, se había sentido muy decepcionado. Cinco años después, no se atrevía a apostar nada. Era la primera vez que Guillermo veía a su hermano en una situación tan deprimida. Su hermano podía ser dominante y controlar todo el Grupo Márquez. Su hermano podría tomar medidas férreas para controlar a esos ejecutivos poco convencidos. Pero ahora ya no parecía confiado. Bueno, Guillermo tenía que admirar a Raquel. En el mundo, solo ella podía controlar a su hermano. Todo tenía su vencedor. Estuvo bien. “Hermano, hermano, déjame hacerte una pregunta. Si mi cuñada realmente tiene un hijo, supongamos que el niño es tuyo, y ciertamente lo criarás, ¿verdad? Por supuesto, Enrique estaba seguro de eso. “Si el niño no es tu hijo...” Los ojos negros hundidos de Enrique lo miraron. No pudo ocultar el rastro de decepción allí. Sin emb