Capítulo 88

El punto de vista de Camila Me desperté sintiéndome mareada. Abrí los ojos lentamente y un techo blanco me dio la bienvenida. Sentí un leve dolor en la nuca, pero aparte de eso, no había nada. Cuando mi vista se ajustó al entorno, comencé a recorrer con la mirada los alrededores. Mis labios se entreabrieron cuando mis ojos se posaron en el hombre que estaba al lado de la cama. Estaba sentado en la silla monobloque. Tenía los brazos cruzados sobre el pecho y estaba durmiendo. Recuerdos de lo que pasó antes de desmayarme volvieron a mi mente. El horror que sentí cuando ese hombre me miró con ojos malvados y una sonrisa espeluznante. Cuando me empujó contra la pared, golpeándome la cabeza y cómo me tiró al suelo. Las lágrimas se acumularon en las esquinas de mis ojos mientras el miedo familiar me atacaba. Mi corazón comenzó a latir dolorosamente dentro de mi pecho y mis dedos comenzaron a temblar. Me tocó, sentí como sus labios rozaban los míos y eso viajó a mi cuerpo. Las lágrimas rodaro