Capítulo 1268
Alicia miró con tranquilidad. —Si es posible, no quisiera regresar a mi pueblo natal, quiero acompañar a Doña Lorena mañana.
La mano de Oscar se cerró lentamente. —Está bien, en realidad no soy tan inflexible. Si tienes alguna idea, puedes decírmelo.
—Entonces, gracias.
Alicia bajó la cabeza para comer, y a su lado Pedro habló en voz baja: —¿No deberías darme las gracias a mí?
Alicia giró la cabeza. —Sí, también te agradezco.
De hecho, si Pedro no hubiera dicho esas palabras, Oscar no habría estado de acuerdo.
Oscar se sintió un poco molesto cuando vio a Pedro susurrándole algo a Alicia frente a él.
Claramente, había sido él quien ayudó a Alicia, pero ella solo le respondía con indiferencia.
Después de que terminaron de comer, Raúl miró a Alicia. —Compré fuegos artificiales, ¿quieres jugar?
Alicia lo miró. —Estoy un poco cansada, quiero subir a descansar.
Pedro dijo: —Entonces, ve a descansar.
Alicia subió.
Pedro miró a Raúl. —Cuando vayan a lanzar los fuegos artificiales, llámala para

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.