Capítulo 1653

Roberto se quedó de pie frente al muro de fotografías, en silencio, sin decir nada. Contemplaba aquellos años gloriosos con una extraña sensación de melancolía. Eduardo se acercó. —En aquel entonces levantamos este equipo con nuestras propias manos. Tu familia no estaba de acuerdo y hasta te cortó el apoyo económico. Éramos pobres, la verdad... jamás pensé que llegaríamos a este punto. Roberto desvió la cabeza. —No lo recuerdo. —Cierto, cómo pude olvidar ese detalle... perdiste la memoria. Lo tuyo parece sacado de una telenovela, viene hasta con amnesia incluida. Apenas terminó de hablar, sintió una mirada gélida sobre él y se corrigió de inmediato. —Era una broma, no te lo tomes en serio. Antes no eras así. Roberto lo miró con una sonrisa ambigua. —¿De veras crees que porque no recuerdo nada puedes tomarme el pelo? ¿Acaso él no sabía bien qué carácter tenía? Eduardo rio. —Yo pienso que tu situación no es tan grave, pero respecto a la señorita Alicia... ¿tú crees que sea posible? —Eso