Capítulo 148

Silvia sacudió la cabeza. “Recogí la pulsera de diamantes justo después del trabajo. Luego, vine aquí enseguida. Puede que el Señor Remus esté haciendo horas extras”. Cuando Abalene escuchó esto, la decepción llenó sus ojos. Al principio pensó que el accidente de Neil los uniría. Después de todo, habían estado viviendo en la misma casa. Pero parecía que las cosas seguían igual que antes. “Está haciendo horas extras incluso en mi cumpleaños. ¡Tienes que regañarlo cuando llegue más tarde!”. Silvia sonrió y le siguió el juego. “¡Claro!”. Cuando Ada vio lo bien que trataban a Silvia, sintió celos y rabia. Abalene siempre la había mirado con extrema indiferencia. Abalene había criado básicamente a Neil, así que él solo la escuchaba a ella. De lo contrario, ¡Ada no se esforzaría por complacer a esta vieja bruja! “Ada... Ada... ¿por qué te has quedado callada de repente?”. La voz de Melanie sacó a Ada de su aturdimiento, e inmediatamente la miró. “Lo siento, Tía Melanie. Me distraje p