Capítulo 187

Silvia solía pensar que Neil le tenía fobia a los gérmenes. Sin embargo, se dio cuenta de su error cuando le vio comerse una alita de pollo que le había servido Abalene. En comparación, él siempre dejaba intacto todo lo que le servía Silvia. No era un germofóbico; simplemente le daba asco. Casi veinte minutos después, Neil terminó por fin su comida. Silvia ya había perdido toda la paciencia. “¿Puedes dejarme ir ya?”. Solo entonces él le soltó la mano. Ella todavía estaba irritada cuando salió de la oficina. Tenía que encontrar la manera de establecer límites claros con Neil. Ryan la vio e inmediatamente se acercó a ella. “Señorita Pond, ¿Neil le ha hecho pasar un mal rato?”. Silvia se sintió reconfortada al ver su evidente preocupación. Sacudió la cabeza y dijo: “No. Yo también siento haberte causado problemas. Te invitaré a cenar algún día”. Ryan sonrió al escuchar esto. “¡Claro que sí! No lo olvides”. “No te preocupes. No lo haré”. De los amigos de Neil, Ryan era el único