Capítulo 473

Poco tiempo después, Winston llevó a Abalene de vuelta a Ciudad Ryoln. Neil envió a su gente a recogerlos y llevarlos a un club privado de la ciudad. Aunque Neil ya había escuchado temprano ese día la voz de Abalene, no se sintió aliviado hasta que la vio de pie frente a él. "Tengo otros asuntos que atender, así que no cenaré con ustedes. Señorita Pond, acompáñeme, por favor. Tengo algunas cosas que contarle", dijo Winston. Silvia miró a Neil. "Ponte al día con la dama Remus. Acompañaré afuera al doctor Russell". Neil, con una mirada fría, asintió y dijo: “De acuerdo”. Los dos salieron entonces de la sala privada. Una vez que Winston se aseguró de que no había nadie cerca, sacó la caja de su maleta y se la pasó a Silvia. "El señor Yerger mencionó que aquí están tu receta y la medicación para tres meses. Ha modificado la receta, así que sus efectos deberían ser mejores que antes". Silvia tomó la caja y dijo con un tono un poco melancólico: “Entendido”. Winston pensó que estaba