Capítulo 16

Brenda había desaparecido durante un mes, y Andrés la buscó como un loco por cielo y tierra, pero no consiguió ningún resultado. Él pasaba los días con la barba descuidada, y todos los días se emborrachaba hasta perder el sentido. Aunque Camila se había mudado de mala gana, en el fondo nunca se resignó. Por poco, ella ya podía reemplazar a Brenda en el corazón y a lado de Andrés. ¿Por qué tenía que renunciar? Decidió arriesgarse una vez más, usando los mismos sucios trucos. Héctor corrió apresurada a la casa de Andrés. —Jefe Andrés, su celular ha estado apagado todo el tiempo, así que tuve que venir a buscarlo. Andrés se bebió de un trago el licor del vaso. —¿No dije que, excepto por asuntos de Brendita, no quería que me buscaran? Héctor exhausto se limpió el sudor de la frente. —¡La señorita Camila tomó una sobredosis de pastillas para dormir, ahora está siendo reanimada en el hospital! Andrés agitó la mano con cierto fastidio. —Entonces llama a un médico, ¿de qué me sirve a mí? Hécto