Capítulo 289

Acepté de buena gana y tomé una foto de la parte trasera del reloj, pero intencionalmente cubrí los detallados números de serie en el bisel. Era muy probable que estas personas intentaran rastrear al dueño del reloj a través de dichos números. María no pudo resistirse a comentar: [Compañera, tu familia parece ser bastante acomodada para tener un reloj tan caro. ¿Es tuyo?] Yo respondí: [No es mío.] María pareció aliviada: [Ah, sabía que no. ¿Cómo podría una niña tener un reloj tan caro?] Yo repliqué: [Es de mi hermano. Tiene un cajón lleno de relojes. Este es el más nuevo. Los otros son todos antigüedades que no me gustan.] María: [...] La gente en el grupo se animó mucho. Empezaron a creer que yo realmente provenía de una familia adinerada con un trasfondo impresionante. Muchos empezaron a elogiarme en sus comentarios. Fue entonces cuando Anita entró en acción. Ella publicó una imagen comparativa de dos capturas de pantalla, burlándose: [María, acabo de buscar por a