Capítulo 93
Sergio sonrió. —Sin dinero.
—¿Sin dinero y aún así conduces tan rápido? ¿No te importa tu vida?
—Jaja, soy tan malo, ¿a quién le importaría? —Sergio mostró una mirada de total indiferencia.
Raquel se quedó perpleja por un momento y respondió: —¡Es verdad! Si tú mismo piensas que eres malo, ¿cómo esperas que a los demás les importe?
Sergio hizo una pausa y su tono se suavizó considerablemente: —Te había pedido que te abrazaras a mí, pero no quisiste. Solo esperaste hasta el momento crucial para hacerlo.
—No te confundas, cuando te abrazaba, estaba pensando en un cerdo.
—¡Jaja! —Sergio soltó una carcajada y, bajo el sol, su expresión se tornó gradualmente más brillante y alegre—. Niña, ¡tus palabras son realmente divertidas!
Raquel se quedó sin palabras; a pesar de tener la misma edad, ¿por qué Sergio actuaba como si fuera más maduro al llamarla "niña"?
—Ahí viene el autobús. —Sergio alzó la barbilla—. Ten cuidado.
Raquel forzó una sonrisa y subió al autobús, pasando su tarjeta. Una vez

링크를 복사하려면 클릭하세요
더 많은 재미있는 컨텐츠를 보려면 웹픽을 다운받으세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.
카메라로 스캔하거나 링크를 복사하여 모바일 브라우저에서 여세요.