Webfic
เปิดแอป Webfic เพื่ออ่านเนื้อหาอันแสนวิเศษเพิ่มเติม

Capítulo 409

—¿Tú dices que anoche Rosa derribó a esos hombres? Luisa asintió con la cabeza. —Sí, ella parece mi asistente, pero en realidad es una guardaespaldas personal que mi papá contrató; es muy hábil. En ese momento, Rosa estaba de pie a un lado, inexpresiva. Fabiola la miró. En sus ojos había una chispa de asombro e incredulidad. —¡Vaya! ¡Eres demasiado fuerte! ¿Dónde se consigue una guardaespaldas tan increíble? Yo también quiero una. Luisa sonrió y dijo: —Mi papá la contrató en el extranjero. Fabiola le comentó: —En mi casa todos los guardaespaldas son hombres, y no es muy conveniente que viajen conmigo. Al mencionar esto, Luisa adoptó un tono serio y le preguntó: —Por cierto, ¿por qué anoche fuiste sola a ese bar? ¿Dónde estaban tus guardaespaldas? Ella se puso un poco incómoda. Dudó, pero le dijo: —Si te lo cuento, ¿no querrás pegarme? Luisa se mostró desconcertada. —¿Por qué iba a pegarte? —Luisa la miró. —Es que...— Fabiola bajó mirada, un poco avergonzada. —Ayer una amiga me llamó y

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์

ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม

เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ

© Webfic, สงวนลิขสิทธิ์

DIANZHONG TECHNOLOGY SINGAPORE PTE. LTD.