Capítulo 50 Te has atrevido
Ella se enderezó inconscientemente, abandonando su postura de quien parece estar cometiendo un delito, y preguntó con incomodidad: —¿Aún no te has dormido o ya te despertaste?
Él, con los brazos cruzados delante de sí, la observaba con una mirada fría: —¿Qué crees?
Ella, con una risa forzada, respondió: —Supongo que ya te has despertado. Estoy agotada después del turno de noche, voy a ducharme y a dormir, encárgate tú del desayuno.
Él exclamó con voz gélida: —¡Daniela!
Daniela se sobresaltó: —No estoy sorda... puedo oírte, ¿qué sucede?
José se levantó y se acercó a ella, apoyando una mano en la pared, acorralándola entre su cuerpo y el muro, y la miró fijamente con sus fríos ojos: —¿Me estás evitando? ¡Daniela, te has atrevido!
Daniela respondió con debilidad: —Acabo de volver del hospital, aún no me he desinfectado, estoy cubierta de bacterias...
Como si evitara una plaga, José retrocedió, pero su enojo era evidente: —¿Quieres irte? Sería mejor que me hicieras aborrecerte lo antes pos

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ