Capítulo 152

—Papá... —¡Abuelo! La familia Torres gritaba con inmenso dolor. ...... —¡Pum! La extremadamente afligida Lourdes sintió un destello negro ante sus ojos, su cintura se tensó y, sin darse cuenta, se elevó del suelo moviéndose rápidamente hacia adelante. —Llévame a la colina trasera a buscar hierbas medicinales. —la voz de Alejandro resonaba en sus oídos. Lourdes se sobresaltó y, al ver cómo el paisaje retrocedía rápidamente a ambos lados, finalmente entendió que Alejandro la había secuestrado. Alejandro la sostenía firmemente por la cintura mientras se desplazaba a una velocidad vertiginosa, similar a un rayo. —¡Sueñas! ¡Mataste a mi abuelo! ¡Esto no quedará así! —Lourdes apretaba los dientes, sus ojos llenos de odio. —La muerte de tu abuelo era inevitable, y yo salvé la vida de tu padre. La recompensa prometida debe ser cumplida. —intentó razonar Alejandro. Los ojos de Lourdes ardían de ira, y su hermoso rostro se torcía ligeramente: —¡Alejandro, prefiero dar las hierbas de mi familia a