Capítulo 67 No nos vamos hasta emborracharnos
Martín ladeó la cabeza para interrumpir las palabras de Juan. —¿Sabes qué clase de personas detesto? —dijo con frialdad.
Juan se quedó atónito por un instante. Tras pensar un par de segundos, lanzó una mirada hacia el otro extremo de la larga mesa y contraatacó: —¿Nora te engañó?
Martín bajó los párpados; su expresión reflejaba impaciencia. —Cada palabra que sale de su boca es una mentira. Puras tonterías.
Juan frunció el ceño, con un dejo de duda en la voz: —¿Y qué fue exactamente en lo que te mintió? ¿Que le dieras dinero?
Martín exhaló una bocanada de humo, y sus ojos entrecerrados se posaron con desprecio en la mujer que estaba no muy lejos. —Dijo que no le importaba el dinero. —respondió con una sonrisa desdeñosa.
—Claro. —continuó Juan. —la última vez le ofrecí 140 000 dólares y no los aceptó. Prefirió quedarse a solas contigo un rato. ¿No crees que haya mujeres capaces de seguirte de verdad, por amor?
Hizo una pausa breve antes de proseguir: —Incluso si suponemos que es astuta,

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ